EL ÁNADE AZULÓN (Anas platyrhynchos)
ÁNADE AZULÓN (Anas platyrhynchos)
Es la anátida más común en nuestro país y en nuestro río, donde cuenta con una numerosa población de individuos reproductores, a los que se unen importantes efectivos procedentes de otros países europeos durante la invernada.
Ave muy generalista en lo que a sus necesidades ambientales se refiere, el ánade azulón frecuenta zonas húmedas de todo tipo, como cursos lentos de agua, marismas, lagunas, embalses e incluso charcas estacionales o estanques en parques y jardines. En todo caso, muestra preferencia por aguas someras o poco profundas, en las que, por sus hábitos gregarios, se concentra en grupos de tamaño variable.
Esta anátida muestra una gran flexibilidad a la hora de alimentarse, de manera que, aunque su principal aporte alimentario lo constituyen las plantas acuáticas, no duda en ingerir insectos, gusanos, moluscos o pequeños peces. Frecuenta también praderas y campos de cereal para alimentarse de hierba y brotes de siembras.
Como rasgos característicos en el diseño de este ánade destacan, por un lado, las dos plumas negras y rizadas que presenta sobre la cola y, por otro, el espejuelo, de una tonalidad azul violácea —de ahí su denominación de azulón—, muy patente en vuelo.
Normalmente, durante el mes de febrero tiene lugar un vistoso cortejo nupcial. Una vez formada la pareja y acondicionado el nido, la hembra deposita en él entre 7 y 13 huevos que incubará entre 27-28 días. Los pollos, que nacen cubiertos de un suave plumón oscuro con manchas amarillentas, son capaces de nadar y bucear a las pocas horas de vida y desde ese momento siguen a su madre en busca de alimento. Cuando cuentan con 50-60 días, pueden volar.